viernes, 10 de octubre de 2014

Faro Querandi

 




El Faro Querandí constituye una de las tantas maravillas de Villa Gesell. 
Casi diez años antes de que Carlos Idaho Gesell llegara al lugar donde hoy esta la ciudad que fundó, el Faro Querandí ya se erigía como un centinela solitario en medio del medanal. 
Esta allí, en lo que hoy es el sur del Partido de Villa Gesell, desde 1922. Su construcción fue una tarea difícil, fue necesario llevar los materiales hasta ese lugar en carretones, porque nunca hubo caminos de acceso, a lo sumo una huella. 
En el principio estuvo solo en medio de las dunas, hasta que los pinos, aromos y acacias comenzaron acompañarlo desde que fue forestado, en la década del 20, el predio circundante. El cual , como el Querandí, pertenecen a la Armada Argentina. 
Aunque el Faro y el bosque que lo rodea no están comprendidos dentro del a Reserva Municipal no es posible desvincularlos de ella, porque están en su entorno inmediato y ambos elementos constituyen un atractivo que visitan miles de turistas todos los años.

El Viejo Centinela tiene 54 metros de altura y es posible llegar a su cúspide, transponiendo una escalera de 276 escalones, desde donde es posible observar las dunas vivas en constante movimiento, el paisaje que encontró Carlos Idaho Gesell en 1931, y así comprender la magnitud de su obra.